Acaba de publicar el CIS un avance de su estudio sobre «Percepciones sobre la igualdad entre hombres y mujeres y estereotipos de género«, donde se recoge eso, la percepción de la ciudadanía sobre la situación de la igualdad, de los movimientos que la promueven y sobre su posicionamiento y valoración personal ante estos hechos. Y nos encontramos ante un cuestionamiento de la persistencia de las desigualdades e, incluso, ante una percepción bastante generalizada de que los avances en igualdad de las mujeres están perjudicando a los varones (cosa que se puede comprender, porque la igualdad cuestiona sus privilegios). La mejor manera de contestar estas opiniones, es echar un vistazo a la realidad de la vida de hombres y de mujeres. ¿Cómo lo hacemos?. Pues a través de las estadísticas y los indicadores de género, que son los datos reales que nos permiten saber si las desigualdades persisten o no, y como afectan la vida de mujeres y hombres,

¿Qué aportan?

• Demuestran que las desigualdades de género persisten y que todos los agentes implicados las deben tomar en serio;
• Contribuyen a aumentar la concienciación de la ciudadanía y de quienes toman las decisiones políticas sobre las desigualdades de género, lo que favorece que puedan adoptar medidas al respecto;
• Proporcionan datos para la elaboración de políticas, programas, proyectos y leyes que respondan a las necesidades tanto de las mujeres y como de los hombres como grupos beneficiarios de las mismas;
• Contribuyen a prevenir la adopción de políticas que perpetúen los estereotipos de género y las desigualdades;
• Facilitan información sobre los posibles efectos de las políticas y las intervenciones tanto en mujeres como en hombres;
• Proporcionan la información para el seguimiento y la evaluación de la ejecución de las intervenciones y para evaluar su pertinencia, eficiencia y eficacia tanto para las mujeres como para los hombres.

Fuente: EIGE – Instituto Europeo de Igualdad de Género

Para cotejar las «opiniones» con las «realidades», haciendo uso de estas estadísticas e indicadores de género, te animamos a echarle un ojo a la publicación «Mujeres y hombres en España«. Aquí, el Instituto Nacional de Estadística, aporta datos de 2022 y 2023 sobre la situación de mujeres y hombres y de las brechas entre ambos, en el ámbito del empleo, de los salarios, de la educación, de la salud, de la conciliación de trabajo y familia, de la ciencia, la tecnología y la sociedad de la información, de la violencia en general y de la de género en particular y de la toma de decisiones y el poder.

También son muy interesantes los recientes datos editados por el Instituto Europeo de Igualdad de Género, en su Índice de Igualdad de Género de la Unión Europea, del año 2023, que ya comentamos en un anterior post.

En las organizaciones públicas y privadas es esencial contar con estos datos para fundamentar el desarrollo de políticas y procedimientos de recursos humanos igualitarios, para medir la diferencia salarial entre hombres y mujeres o la representación de las mujeres en puestos de toma de decisiones. Las organizaciones internacionales (como la Comisión Europea, las Naciones Unidas, la Organización Internacional del Trabajo y el Banco Mundial) utilizan con frecuencia estadísticas e indicadores de género para fundamentar las auditorías de género y medir los progresos en materia de igualdad de género en sus estructuras internas, procedimientos, recursos humanos y cultura.

Así que, recuerda, ¡con datos se opina y se decide mejor!

¡Si necesitas profundizar en este tema, no dudes en contactarnos y buscaremos la mejor forma de hacerlo, adaptada a tus necesidades, intereses y posibilidades!