Según lo datos de la EPA del tercer trimestre de 2023, a pesar de que se ha alcanzado el máximo histórico de mujeres ocupadas (9.878.200), su tasa de empleo sólo ha subido en 18 centésimas y se mantienen e incluso aumentan, las brechas de género con los varones en prácticamente todas las variables.
Ocupación
En el caso del empleo, aumenta este trimestre en 130.500 hombres y en 78.600 mujeres. En los 12 últimos meses el empleo ha aumentado en 720.100 personas (272.600 hombres y 447.500 mujeres).
Desempleo
Por su parte, el desempleo también aumenta mayoritariamente en las mujeres, con un incremento de 68.400, frente a los 24.400 varones, quedando la cantidad de 1.553.400 desempleadas y 1.301.800 desempleados. La cifra total de desempleados se ha reducido en 125.000 personas en un año, con un descenso de 35.000 en los hombres y de 90.000 entre las mujeres.
La tasa de paro femenina sube 43 centésimas y se sitúa en el 13,59%. La masculina se incrementa siete centésimas y queda en el 10,26%.
Población activa
La población activa, ha vuelto a marcar un nuevo máximo en el tercer trimestre: tras crecer en 301.900 personas (147.000 mujeres y 154.900 hombres), el número de personas trabajadoras que tienen o buscan empleo se elevó entre julio y septiembre hasta los 24,12 millones.
Por su parte, la tasa de actividad sube 44 centésimas, hasta el 59,41%. La de los hombres se incrementa 48 centésimas y se sitúa en el 64,41% y la de las mujeres sube 41 centésimas, hasta el 54,70%.
Como se puede apreciar, lo datos del mercado laboral en general parecen mejorar, sin embargo, se observa un repunte de las brechas de género, lo que de nuevo apunta a dos posible valoraciones: la persistencia de una arraiga división sexual del trabajo, donde las mujeres siguen dedicando más tiempo a los cuidados y los hombres más tiempo al empleo (o a su búsqueda) y un mercado laboral aún muy androcéntrico, menos permeable al acceso y permanencia de las mujeres. Aún nos sigue quedando mucho camino por andar….