El Reino Unido conmemora este jueves el bicentenario del nacimiento de la novelista y poeta Charlotte Brontë (1816-1855), una de las autoras más reconocidas de la literatura inglesa, cuyo trabajo abrió un camino vedado a las mujeres en el siglo XIX.
En aquella época, las autoras británicas eran vistas como «locas del ático» por desoir los mandamientos patriarcales y dedicarse a su pasión: la literatura.
Brontë hablaba de desigualdad e insubordinación, también denunciaba la hipocresía de los clérigos y cuestionaba la superioridad de las autoridades. Esto, en una Europa de revoluciones contra el capitalismo y la industrialización, era poco menos que una invocación satánica. Las publicaciones más críticas con el movimiento obrero pronto acusaron a la novela de «jacobinismo moral», de fomentar la anarquía social y de acoger fundamentos anticristianos.
[Fuente: elDiario.es]



